martes, 30 de octubre de 2007

LA PALABRA HUEVÓN

Pavel me trajo de regalo de Chile este libro, cuyo contenido había vislumbrado a través de Internet y plasmé en algunos posteos, pero no imaginaba la profundidad del análisis lingüístico que precede a la descripción de esta familia de palabras;
es realmente valioso para mi tesina.
¡Gracias Pavel!

miércoles, 24 de octubre de 2007

TEXTOS ERÓTICOS DEL RÍO DE LA PLATA



¡Finalmente encontré el libro de
Robert Lehmann-Nitsche
en la Librería Histórica - Emilio J. Perrot!


I M P E R D I B L E

CÓMO SE CONSTRUYE UN INSULTO


En la búsqueda de bibliografía ad-hoc, di con "Puto el que lee: diccionario argentino de insultos, injurias e improperios" producido por la revista Barcelona.

Este diccionario, en su Anexo II, trae un cuadrito que enseña a construir insultos; por ejemplo:

- verbo en imperativo: Andá

- preposición: a

- verbo cagar en infinitivo: cagar

- lugar incierto: el carajo, la mierda, la concha de tu madre

- coma: ,

- refuerzo no obligatorio: boludo, forro, conchudo, etc.


Hay otros ejemplos pero para conocerlos deberán comprar el librito, donde también encontrarán una práctica "guía de gestos insultantes", para cuando las palabras huelgan.

Y ya que estamos insultando, deberíamos conocer las diferencias entre la calumnia y la injuria, para lo que me baso en una nota encontrada entre mis papeles, la que fuera escrita por Jorge Aulicino para el diario Clarín del 2 de noviembre de 1986 (demuestra una vez más que hace mucho que me intereso por las malas palabras):

Injuria: delito contra el honor que recibe penas de un mes a un año redimible a veces con multa.

Calumnia: injuria especial que consiste en atribuir a otro un ilícito concreto (debe ser concreto y determinado, porque los calificativos de ladrón, asesino o estafador, dichos en forma genérica, sólo constituyen calumnias simples). Se paga con penas de prisión de uno a tres años.

La ley juzga el carácter objetivo del insulto y no la intencionalidad. En este sentido, el derecho moderno abolió el criterio casi inquisitorial de juzgar con qué intención se dijo algo contra alguien. Y el carácter objetivo está dado por "la potencialidad ofensiva otorgada por la sociedad a un término determinado".

Ya sabemos cómo construir un insulto y lo que nos espera si somos llevados ante los Tribunales; ahora ¡a arremangarse!

viernes, 19 de octubre de 2007

EL TÍTULO


Ayer Alejandro me pidió que listara posibles títulos para esta tesina.

Fiel a la consigna de poner todo lo que a uno se le ocurra, surgió esta lista, mezcla rara de seriedad con cualquier cosa.

1. Vida y obra de las malas palabras

2. ¿Qué pasaría si desaparecieran las malas palabras?

3. Las malas palabras en la comunicación oral y escrita

4. Las malas palabras en el hablar cotidiano

5. ¿Qué palabras son malas?

6. Línea histórica de las malas palabras

7. Juicio oral a las malas palabras

8. Mi defensa de las malas palabras

9. Por qué decimos malas palabras

10. Buenas y malas palabras

11. Groserías, lisuras y otras yerbas

12. Usted, yo y las malas palabras

13. Perdón ¿qué me dijo?

14. Lo mismo para usted...

15. Malas palabras vs eufemismos

¿Me ayudan a elegir?
Acepto (y agradezco) sugerencias de otros títulos posibles.

jueves, 18 de octubre de 2007

MALANDRAS


Curiosidades etimológicas” de Salvador Diego Navas, es el libro del que rescaté la historia de ciertos términos rufianescos y cuasi prohibidos aplicables al sexo masculino.


BUFARRÓN: de uso común en la República Argentina como deformación fonética de bujarrón, que la Academia registra como afecto a practicar el concúbito entre varones contra el orden natural. Del italiano buggerone y éste del latín bulgarus, o sea del reino de Bulgaria, cuyas hordas de guerreros, además de darse al saqueo, practicaban la sodomía con los habitantes de los puebles que invadían.


CAFISHIO: define al hombre que vive explotando a la mujer. Etimológicamente proviene del italiano stocafisso, alemán stock fisco, o sea pez palo. No eran los tratantes de blancas jóvenes deportistas, y su aspecto rígido, pálido, propio de la noche, les cargó este apelativo por comparación con el pescado seco. En el lunfardismo porteño, el término derivó en otros como cafiolo, canfinflero, canfle, fioca, ofica, y el verbo cafishiar “vivir de otro”. No debe confundirse cafishio con cadenero, que es el amante que vive de su mujer y la manda. Por otros motivos también apela a los peces el argot francés cuando al proxeneta se lo llama maquereau (macró en lunfardo) que no es otra cosa que la caballa, debido a las leyendas que entre los pescadores europeos mostraban a este pez como guía de los arenques hembra en su apareamiento con los machos.


CROTO: con este nombre se designa en nuestro país al vagabundo mal entrazado. Su historia se remonta a 1920, cuando José Camilo Crotto, a la sazón gobernador de la Provincia de Buenos Aires, para facilitar el traslado de braceros a la cosecha permitió que viajaran sin pagar en los trenes de carga, por lo cual la gente al verlos pasar decía: “ahí van los de Crotto” y luego simplemente los crotos, ya con una sola t. Decir que la idea del gobernador fue buena y merecedora de un aplauso sería provocar una coincidencia, ya que en la mitología griega fue Croto, hermano de leche de las musas, quien para mostrarles su admiración las felicitaba golpeando las palmas constituyéndose en inventor de los aplausos.


FARABUTE: en el lunfardo porteño es el hombre fanfarrón, poco creíble, de vida no muy clara y ostentosa. Un conocido tango dice: “Deschavate farabute, no naciste pa’cafishio, al laburo dedicate que ahí está tu salvación”. Sus antecedentes se encuentran en el italiano farabutto y el español haraute o faraute, ambos descendientes del alto alemán hariwalto = heraldo, Rey de Armas. Era éste el portavoz de los príncipes, quien publicaba sus órdenes y notiias, como lo había sido antes en Grecia, donde convocaba a los ejércitos. Poco a poco la palabra se apartó de este heraldo clásico, pasando a ser, en el principio de la comedia, quien hacía el prólogo. Fue luego el bullicioso entrometido que da a entender que lo dispone todo, y en su ruta descendente definió al trujimán, persona sagaz y astuta, luego al mensajero más aún al alcahuete, terminando su ocaso como sinónimo de mandilandín, criado de rufianes y mujeres públicas. Hoy su uso más corriente se aplica al charlatán ostentoso y hombre de poca confianza.


RUFIÁN: llámase rufián a quien hace el trato infame de mujeres públicas y también al hombre sin honor, perverso, despreciable. Etimológicamente derivado del latín rufus "pelirrojo", es rufian en francés y ruffiano en italiano. Para ubicar su origen debemos remontarnos a épocas imperiales cuando las meretrices romanas acostumbraban a adornar sus cabezas con pelucas rubias rojizas. Dante y Boccaccio emplean el término ruffiano, que se aplicaba al tratante de dichas mujeres, y en Bomarzo, cuando el protagonista visita en Florencia la casa de la cortesana Pantasilea, Manuel Mujica Láinez dice "entonces apareció Pantasilea. Su cabellera roja, teñida con los reflejos sutiles caros a los venecianos, en la cual se entrelazaban una frescas hojas de laureles con hilos de perlas". Así, con la raíz ruffo se creó la palabra rufián, que etimológicamente es quien hace el trato de mujeres de pelo rojo.

CANCIONERO INFANTIL

Intenté conseguir el libro Textos Eróticos del Río de la Plata, que fue editado en español en 1981, pero a pesar de que figuraba en la página de Internet de la Librería Histórica a $ 90, en el momento de comprarlo me pidieron $ 200, así que las poesías infantiles recopiladas por Lehmann-Nitsche hace 100 años que transcribo a continuación me fueron gentilmente facilitadas por Ricardo.

En la puerta de mi casa
tengo un granito de arroz
donde cagan los pollitos
la mierdita es para vos (Buenos Aires)

Para ser puta
y no ganar nada
mas vale ser
mujer honrada (Buenos Aires)

Cuando se mueve la cama
también se mueve el colchón
y es seña que están de farra
la ñata y el narigón (La Plata
)

Bolas van
bolas vienen
y en tu culo
se detienen (Buenos Aires)

En la sierra de Tandil
Maté un toro de un puñete
Y si no lo quiere creer
aquí tiene el ojete (Buenos Aires)

Una vieja y un viejo
hicieron un guiso
la vieja puso la olla
y el viejo el chorizo (Santa Fe)

La concha le dijo al culo:
¡qué cerca hemos vivido!
Como te vi tan barbudo
No te había conocido (Jujuy)

Bartolo toca la flauta
La hermana la bandurrieta
Y la hermanita más chiquita
se tocaba la cajeta (Buenos Aires)

ROBERT LEHMANN-NITSCHE


Ricardo Braun, compañero del Taller de Proyectos de Escritura, me acercó una información valiosa sobre textos eróticos del Río de la Plata recopilados a principios del siglo pasado. Este posteo es fruto de su investigación.
Robert Lehmann-Nitsche fue un antropólogo y lingüista nacido en Alemania en 1872, que llegó a Buenos Aires en 1897 con la misión de integrarse al grupo de científicos del Museo de La Plata, dirigido entonces por el perito Francisco Moreno. Al tiempo que aprendía el idioma comenzó un profundo estudio de las características culturales del país. Reunió un extenso repertorio de chanzas, chistes, adivinanzas, dichos y refranes, que fueron recopilados en un libro editado como parte de los festejos del Centenario.
Su área de interés fue el folklore sexual, lo que plasmó en “Textos eróticos del Río de la Plata: ensayo lingüístico sobre textos sicalípticos de las regiones del Plata, en español popular y lunfardo”, editados en alemán en 1923 en Leipzig con el seudónimo de Víctor Borde.
Volvió a Alemania en 1930 pero siguió conectado con colegas argentinos y colaborando con la revista del Museo de La Plata y el diario La Prensa de Buenos Aires. Redactó numerosas obras, entre las que se encuentra una antología de la poesía argentina de tipo pastoral, en edición bilingüe. A su muerte, su biblioteca se dispersó y buena parte de sus manuscritos y folletos, que el Estado argentino desdeñó por juzgarlos irrelevantes en función de sus intereses bajos, están conservados en el Instituto Iberoamericano de Berlín.
Lo curioso es que en el prólogo de Adivinanzas Rioplatenses, donde presenta más de 1.200 adivinanzas y sus respectivas variaciones (se omiten las escatológicas) dice: “Tal vez muchos argentinos de hoy no sabrán prestarle mayor atención; dedico, pues, la primera parte de mi folklore argentino al pueblo del año 2010”. ¿Premonitorio?

miércoles, 17 de octubre de 2007

EXPERIENCIA DE VIDA

¿Cómo pasé de la niñita que buscaba malas palabras en el diccionario a la adulta interesada en el tema al punto de hacerlo materia de una tesina?

No me recuerdo mal hablada, en realidad, no me ayudaba el entorno. Una vez ligué tremenda cachetada cuando, sin conocer el resto de la frase, le dije a mi mamá que parecía “la gata de doña Flora” (cuando se la meten grita, cuando se la sacan llora).

No se puede nombrar lo que no se conoce y ¿cómo llegué a conocer ciertas palabras?

En mi juventud no había computadoras personales (¡¡y mucho menos Internet!!)

Ahora, pongo “malas palabras” en Google y aparecen 676.000 páginas en español (y este blog entre ellas). Lo mismo pasa si busco groserías (506.000), palabras malsonantes (267.000) o lisuras (24.200).

He encontrado diccionarios de los más variados orígenes (chilenos, colombianos, peruanos, mejicanos), lo que resulta muy útil porque, como leí por ahí, “para ofenderse y ofender, es necesario hablar el mismo idioma”.

Estoy tapada de información pero divertida, como aquel niñito del cuento que bajo una pila de mierda buscaba el pony.

martes, 16 de octubre de 2007

COPROLALIA


Navegando por Internet, acabo de aprender una nueva palabra, derivada del griego krópos = excremento y lalein = hablar: coprolalia. Según el diccionario de la RAE es la "tendencia patológica a proferir obscenidades".

Leí que también se utiliza para referirse a una forma de expresión popular cada vez más generalizada, sobre todo en las personas más jóvenes, atribuida a una profunda pereza mental y reducción en el vocabulario, como producto de una pobre formación académica y cívica.

Descubrí que existe una enfermedad, el síndrome de Tourette, trastorno neurológico que provoca movimientos y sonidos vocales involuntarios y repetidos (tics) que, en algunos casos, incluyen palabras y frases inapropiadas, o sea coprolalia.

Según la Wikipedia, los síntomas de esta enfermedad se manifiestan en el individuo antes de los 18 años de edad y puede afectar a personas de cualquier grupo étnico pero los hombres están afectados 3 ó 4 veces más que las mujeres.

Mozart padeció esta enfermedad; su coprografía y su coprolalia son referidas por múltiples escritos de amigos. De las 371 cartas suyas que se conservan, en 39 de ellas se han encontrado términos malsonantes como caca, pis, culo, etc. Eso no impidió que nos dejara 626 composiciones, entre ellas, 47 sinfonías, 21 óperas, 19 misas, 41 sonatas y 30 conciertos para piano y orquesta.

jueves, 11 de octubre de 2007

CLASIFICACIÓN DE HUEVONES

Huevo de 1895 - Fabergé
El tema parece no tener fin...

Pavel, en su comentario a mi post previo, aclara que "en Chile decir Huevón está mal, muy mal. Debe decirse won, o uon, pues de la primera forma pierde el sentido original y se va a algo docto, ciertamente poco eficaz o eficiente a la hora de buscar resultados. Es interesante como además se le ha desarrollado el femenino wona, modo que no estaba en la lengua original."

A lo mejor sirve de ayuda la clasificación que transcribo ahora, aunque parece que sólo los chilenos saben que huevón usar, en qué contexto hacerlo y con qué entonación.

01. Huevón ecológico: Es huevón por naturaleza
02. Huevón optimista: Cree que no es huevón
03. Huevón pesimista: Cree que sólo él es el huevón
04. Huevón telescópico: De lejos se le nota lo huevón
05. Huevón fosforescente: Hasta en la oscuridad se le nota lo huevón
06. Huevón aplicado: Se preocupa por aprender huevadas
07. Huevón esférico: Por cualquier lado que lo veas, es un huevón
08. Huevón laborioso: Todo el día se la pasa haciendo huevadas
09. Huevón petulante: Se enorgullece de sus huevadas
10. Huevón amigable: Tiene puros amigos huevones
11. Huevón enciclopédico: Sabe un montón de huevadas
12. Huevón simpático: Sus huevadas causan risa
13. Huevón campana: Es tan, tan, tan, pero tan huevón
14. Huevón creyente: Se cree cualquier huevada
15. Huevón convicto: Sabe que es un huevón
16. Huevón campeón: Nadie le gana haciendo huevadas
17. Huevón pedigrí: Desciende de huevones campeones
18. Huevón alegre: Se ríe de cualquier huevada
19. Huevón introvertido: A nadie le cuenta sus huevadas
20. Huevón enamorado: Le gusta cualquier huevada
21. Huevón líder: Le siguen todos los huevones
22. Huevón inútil: A nadie le sirven sus huevadas
23. Huevón pelón: A cuenta de que es calvo cree que no tiene ni un pelo de huevón
24. Huevón clandestino: Se esconde para hacer huevadas
25. Huevón ambicioso: Sueña con ser un gran huevón
26. Huevón presidiario: Está en la cárcel por huevón
27. Huevón hiperactivo: Hace una huevada tras otra
28. Huevón filósofo: Se pregunta porqué es tan huevón
29. Huevón políglota: Dice huevadas en varios idiomas
30. Huevón xerox: Copia las huevadas de los demás
31. Huevón esperanzado: Cree que algún día se le quitará lo huevón
32. Huevón ignorante: Todos saben que es un huevón, menos él
33. Huevón añejo: Cada año que pasa se hace más huevón
34. Huevón insistente: Hace las mismas huevadas varias veces
35. Huevón vigoroso: No se cansa de hacer huevadas
36. Huevón precavido: Es huevón por si se ofrece
37. Huevón multifacético: Es el que abarca dos o más categorías
38. Huevón estudioso: Es el que estudia para ser huevón
39. Huevón miedoso: Se asusta de cualquier huevada
40. Huevón obediente: Es el que hace cuanta huevada le mandan

Creo que soy una wona multifacética...

HUEVADAS

Como les prometí, aquí está la familia de los huevos.


El lingüista chileno Emilio Ávila, en su libro "La palabra huevón" (escrito bajo el seudónimo de Cosme Portocarrero), dice que hay 14 términos derivados del concepto "hueva" y que, curiosamente, la madre es la que tiene el uso más restringido. "Solamente aparece en frases como ¿Podría quedarme en tu casa? ¡Las huevas! Es el concepto más rotundo para negarse a algo."


A través de páginas de Internet de origen chileno, pude rastrear a algunos descendientes y sus significados:


Huevada: tontería, idiotez; acción torpe, inconsulta o insensata


Huevamen: irónica y fingidamente científica, es voz festiva para llamar a ambos testículos


Huevear: realizar acciones sin objetivos definidos o útiles, como vagar o molestar. También se refiere a divertirse irresponsable y puerilmente, parrandear, haraganear


Hueveo: se refiere a actividades inclinadas a la travesura, pérdida de tiempo, y que reciben la reprobación de personas graves y formales, aunque no constituye una acción punible o vergonzosa


Huevera: se usa para nombrar a ambos testículos


Hueveta: como sustantivo se aplica a quien es torpe, pesado, pretencioso o estúpido


Huevinca: vanidad adecuada para ser exhibida incluso en los salones


Huevonaje: es un término ultra despectivo, equivalente a chusma o gentuza


Huevoncete: despectivo equivalente a "pobre huevón"


Huevoncito: intensifica el juicio sobre la calidad humana de una persona


Huevoneo: sustantivo de aplicación limitada


Huevudo: puede usarse como valiente o como estúpido

¿Quién conoce otros familiares?


Ilustración: Torre Galatea y su corona de huevos - Dalí

miércoles, 10 de octubre de 2007

HUEVÓN


Ricardo, uno de mis compañeros del Taller, suele nutrirme de valiosísima información para mi tesina. Uno de los datos que me dio fue el del libro “La palabra huevón” de Cosme Portocarrero (seudónimo del lingüista chileno Emilio Ávila). Allí se dice que para los chilenos es “la palabra más común del idioma… muletilla omnipresente; apoyo verbal, sin el cual los discursos de nuestro pueblo palidecerían, se desinflarían, cojearían heridos en el ala, huérfanos del colofón que redondea cualquier enunciado conversacional…”

Para el diccionario de la RAE es un americanismo que significa lento, tardo, bobalicón, ingenuo.
También Camilo José Cela la incorpora a su Diccionario Secreto y le otorga distintos significados según el país: Chile: brutal, estúpido, cobarde; Venezuela: tonto; Perú y Puerto Rico: majadero; Cuba, Guatemala y Méjico: haragán. Termina diciendo que es un término de muy flexibles acepciones.

Tiene su origen en hueva del latín ovum, de donde surge huevo, que por semejanza física se utilizó para designar a los testículos. Fiel al germen de vida que conlleva, del huevo nació una familia de palabras que dará para otro posteo.
Pero la más famosa es huevón (literalmente: hombre de testículos grandes), a la que, con el tiempo, se le dieron otros usos: puede ser sustantivo, adjetivo y verbo. Algunos ejemplos:

  • Como vocativo: semejante a fulano, sujeto, tipo
  • En tratamiento amistoso: amigo, compadre
  • Como elemento fático: oye
  • En forma peyorativa (las acepciones del diccionario): tonto, torpe, estúpido, o bien desprevenido, confiado, incauto, cándido
  • Hasta puede significar: idealista, altruista, honrado, puro, bonachón o, aún, bueno
La que en un principio fue una palabra injuriosa, pasó a ser usada en todos los estratos sociales y hoy en día es común que los chilenos, en su hablar cotidiano, terminen casi siempre sus frases con un “on”, “won”, “gwon”. Una demostración de la importancia que le otorgan, son los foros que se arman para debatir sus significados y alcance (el año pasado hubo uno en la Universidad Diego Portales y otro en la Biblioteca de Santiago) y la película de Boris Quercia (un cineasta chileno exitoso): "El rey de los huevones", cuyo afiche ilustra este posteo.

martes, 9 de octubre de 2007

ESCATOLOGÍA

Tanto el diccionario de la RAE como la Wikipedia dan cuenta de las dos acepciones de esta palabra:
  • Conjunto de creencias y doctrinas referentes a la vida de ultratumba
  • Tratado de cosas excrementicias // 2. Cualidad de escatológico

A su vez, escatológico también tiene dos acepciones:

  • Relativo a las postrimerías de ultratumba
  • Referente a los excrementos y suciedades

Aprendí lo que era la escatología de grande (en su segunda acepción porque la primera la acabo de descubrir) pero recuerdo haberla practicado de chiquita, si se puede llamar así a la búsqueda de palabras “prohibidas” en el diccionario.


Por ejemplo, empezaba por:

Culo (del lat. culus) m. Nalgas // 2. Zona carnosa que, en los animales, rodea el ano. // 3. Ano

Entonces, seguía buscando :

Ano (del lat. anus) m. Orificio en que remata el conducto digestivo y por el cual se expele el excremento.

Verdaderamente escatológico pero ¡qué decepción para una chica que buscaba aprender cosas chanchas! Seguía:

Teta (del germ. titta) f. Cada uno de los órganos glandulosos y salientes que los mamíferos tienen en número par y sirven en las hembras para la secreción de la leche.

Pito (no decíamos pija) (de la onomat. pit) m. Instrumento pequeño que produce un sonido agudo cuando se sopla en él, silbato.

No aprendí mucho así; es más, tuvieron que pasar varios años hasta que pude robarle a mamá “El matrimonio perfecto” de van de Velde para mejorar mi educación sexual (no crean que mucho porque aunque había sido etiquetado como “libro prohibido” fue escrito en 1926)

Pero ¡Pis y caca, el enmascarado no se rinde! (grito de guerra del papá de Mafalda), y así fue que busqué:

Caca f. Excremento humano, y especialmente el de los niños pequeños ¿?

Pis m. pipí ¿?

Entienden ahora porque quedé fascinada con la serie “Asquerosología” ¡Era una asignatura pendiente para mí!


Y ustedes ¿qué buscaban en el diccionario?



Nota: en el "Diccionari (abreujat) del bon culer" se desarrollan jocosamente los tópicos futbolísticos ligados a la actualidad y la historia del Barça, ordenados a modo de diccionario de expresiones habituales del aficionado azulgrana.
¿Qué se habían imaginado?


ASQUEROSOLOGÍA


Descubrí en una librería para chicos la serie "Asquerosología, la ciencia de las cosas que dan asco", publicada por Ediciones Iamiqué. Es una traducción al español de "Grossology, the (impolite) science of the human body" de Sylvia Branzei.

Es llamativo ver que todas esas funciones corporales que los adultos "educados" tratamos de disimular, aquí están descriptas con lujo de detalles, sin tapujos ni eufemismos. Por ejemplo, en "Asquerosología de la cabeza a los pies" hay tres secciones tan curiosas como escatológicas:
  • Asquerosidades blanditas, pegajosas y barrosas: vómitos, mocos, caca, diarrea, pis, saliva y escupitajos, "agüita" de la nariz, cera de la oreja, granos y ampollas

  • Asquerosidades con costras y escamas: caspa, costras y heridas, lagañas, sarro dental

  • Asquerosidades olorosas y apestosas: pedos, eructos y provechitos, olor corporal y sudor, mal aliento, pies olorosos
Hay explicaciones científicas, anécdotas históricas, mucho humor, pero por sobre todo una forma de llamar a las cosas por su nombre que divierte y sorprende (sobre todo a quienes nos enseñaron que "eso no se dice, eso no se hace, eso no se toca")

miércoles, 3 de octubre de 2007

GERUNDIO PROSCRIPTO


Por imperdible, transcribo la noticia publicada en la página 20 del Ámbito Financiero de hoy.


Brasilia (EFE) - Una decisión del gobernador de Brasilia, José Roberto Arruda, que prohibe el uso de gerundios "como disculpa por la falta de eficiencia", abrió ayer una polémica que involucró a políticos y también a lingüístas que defienden esa forma gramatical. El inicio de la polémica radica en un decreto estadual conocido ayer y dictado por Arruda, según el cual "queda prohibido el uso del gerundio como disculpa por la falta de eficiencia" en toda la administración brasileña. En la práctica, eso supone "prohibir" a los funcionarios públicos expresiones como "estamos planificando", "estamos preparando" o "estamos estudiando", que, según portavoces del gobernador, son usadas como excusas para esconder la ineficacia. "Llegué a pensar que era una broma, pero es en serio" declaró al diario "Correio Brazilense" el secretario de Cultura del Distrito Federal de Brasilia, Silvestre Gorgulho.

CENSURADO


¿Contra qué estoy peleando? ¿Quién o quiénes las llaman “malas palabras” y quieren hacerlas desaparecer? ¿Tengo aliados?
En trance de identificarlos, di con estos dos autores:

Camilo José Cela: en su Diccionario Secreto repite algo ya esbozado en su anterior ensayo Sobre España, los españoles y lo español: “la ñoñería, la pudibundez española, es un fenómeno tan reciente como disímil de nuestra originaria idiosincrasia, que entiendo posterior –añado ahora- a los Reyes Católicos y que sospecho más o menos coetánea de la cristianización de los judíos y el subsiguiente poder político –y administrativo y eclesiástico- que adquirieron. El romano Séneca, el moro Ibn Hazm y los cristianos Beato de Liébana y Elijando de Toledo –quizá anteriores a los españoles pero, en todo caso, no judíos-, eran proclives a obscenidades y violencias léxicas, al paso que los hombres formados, por tradición, en la observancia de la ley mosaica, se mostraban virtuosos en la conducta y prudentes en el hablar y el escribir… El eufemismo es tanto un arma grata a los judíos como un deber que les impone la conciencia…”

Más acá en el tiempo y el espacio, Enrique Fraga, en su ensayo La prohibición del lunfardo en la radiodifusión argentina 1933-1953, cita a Jaime Rest: “Las palabras documentan la historia íntegra de una época. La perduración de los hechos sociales se transforma, con el tiempo, en una pura y exclusiva perduración verbal” y arriesga que “la censura aplicada ora en las letras de tango, ora en otras expresiones artísticas, borraba no sólo aspectos lingüísticos o modismos idiomáticos incorrectos, sino que consciente o inconscientemente, destinaba al olvido los rasgos y hábitos de vida históricos de toda una sociedad. Sin ir más lejos, muchos vocablos del lunfardo evocan y expresan muchas vicisitudes del proceso inmigratorio y de la interacción con la población criolla.”

Voy juntando información para armar la defensa…